El productor y músico panameño Némula regresa con "Sensei espiritual", después de haber lanzado "Bailes raros" hace un año.
El artista panameño influenciado por la música disco, electrónica y rock and roll, mencionando bandas como los Bee Gees, Tame Impala y Pink Floyd.
Durante la entrevista, nos contó que "Sensei espiritual" habla mucho sobre la experimentación con el tema de la muerte, para poder explicárselo a su hija. Le explicó que en algún punto de su vida ya no estará presente de manera física, pero que podrá encontrarlo en todas las cosas que vea y en su música. Citándolo: "Es como un tema palpable sobre la muerte y mi ausencia física en su vida. Más que nada, el tema trata de eso. Es el primer tema que saqué del disco y marca para mí un camino muy claro."
En cuanto a la música del disco, se realizó de manera diferente a como él suele trabajar. Usualmente, la composición se hacía a través de la guitarra, pero en esta ocasión, solo se hizo con el teclado, mezclando la voz al final. "Para mí fue algo diferente y me gustó mucho esa estrategia o aproximación a la composición. Creo que la estoy implementando en todo lo que va de este disco nuevo y siento que me ha inspirado mucho esa forma de hacer las cosas ahora."
Este álbum tiene un concepto sobre la vida y cómo alguien madura en muchos aspectos. Habla de cómo se ve la vida de otra forma, cómo las cosas que antes solían gustarle ya no le llaman tanto la atención. Es un aspecto muy sincero en la música, ya que se usan menos elementos en la producción, además de haber usado menos capas en la grabación. Desde el disco pasado, se empezó a trabajar con teclados análogos, y lo único programado eran los elementos percusivos y de ritmo. Las letras ya no son de amor, desamor o tristeza, sino que ahora son un poco más alegres y tratan de otros temas relevantes para el artista.
Para este nuevo material, Némula ha optado por una colaboración que promete enriquecer su sonido. El disco, que aún está en proceso de finalización, está siendo co-producido con Félix Lambis, un amigo músico que también forma parte de su banda en vivo. Félix, quien se encarga de la guitarra y el teclado durante las presentaciones en vivo, ha aportado una perspectiva fresca y crítica al proyecto.
El artista explica que trabajar con Félix ha sido una experiencia reveladora. "Siento que ahora es más fácil entregarle todo a alguien más, con una vista de tercera persona, que no tiene ningún enamoramiento con nada y lo ve todo fríamente. Necesitaba un ojo frío que dijera 'esto no funciona, empecemos por acá'."
El proceso de co-producción ha sido fluido y enriquecedor. Némula comparte que, aunque siempre está presente en cada etapa del proyecto, una vez que tienen la idea básica y todo está listo, le entrega a Félix la tarea de refinar y ajustar los detalles. "Estoy siempre ahí, pero cuando tenemos la idea básica y todo listo, le entrego y veo que él corta, empieza por acá, y por qué no quita el verso, le corta una vuelta y me ha gustado ponerlo en práctica en este disco."
La dinámica colaborativa que pasó esta canción originalmente fue compuesta principalmente con dos acordes. La estructura de la canción era sencilla, pero Félix en el estudio sugirió agregar unos acordes a partir del segundo coro para abrir más la canción y darle un pequeño ajuste. "Es interesante escuchar el antes y el después. Eso es lo lindo, porque es una experiencia de experimentación y rodeándote de otras personas te ayuda a llegar a ese lugar donde quieres llevar tu música, pero mirándolo desde otro punto de vista." Este enfoque le ha permitido a Némula mantenerse abierto a nuevas ideas y aportaciones, enriqueciendo su obra con perspectivas diferentes.
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